Dejo adentro

No dejo atrás, dejo adentro
este 2016 que me sacudió de la rutina
en busca de tierras más fértiles
donde pastaran los pterodáctilos.

Dejo adentro el rumor del río,
el cantar de los pájaros,
la sonrisa de personas
abiertas a la esperanza.

Dejo adentro amistades profundas
hechas de alegrías y malos tragos
amasadas al calor de hogares acogedores
Kan Pajaritos, Casa Emoción, la Becerresi
fueron mis refugios en los días largos.

Fui testigo excepcional de un alumbramiento
Amar nació de la sierra y de la libertad
de los sueños hechos realidad
como el disco de música que ahora estoy presentando.

No dejo atrás, dejo adentro
una experiencia maravillosa
fruto de saltar al vacío
y aprender a caminar
sin caminos trazados.

Supongo que este invierno me dió frío
se congelaron mis sueños
al hacer un pacto con mis limitaciones.
Intentaré no ser muy trágico.

Sólo se que volé junto a aves de vuelos ligeros
vuelos rurales y aldeanos.
El futuro no está escrito,
vuelvo a la ciudad
con la mochila cargada de experiencias,
de caras nuevas, quizás de otras vidas.
Vuelvo a Mordor Town,
porque la lucha sigue, la Vida sigue,
y que nos quiten lo volado,
que nos quiten lo cantado,
que nos quiten lo bailado.

Concierto Ítaca, Galapagar, junto a María Scarr

Rústicos acústicos, con Sara y Salva, mis primos de la sierra