“La esperanza es algo
con alas
que se posa en el alma
y canta la melodía sin
palabras
y jamás se detiene”
(Emily Dickinson)
No se que
traes 2015 escondido bajo el brazo
que los
pájaros del parque no dejan de asomarse
ante la
atónita mirada de los paseantes
no se que
esconde este solsticio de invierno
donde las
margaritas de la terraza quieren florecer
me huele a
viejas promesas mayas
de un cambio
que no llegó porque está llegando
creo que he
visto una luz al otro lado del río
y mientras
saboreaba las uvas
me daba
cuenta que los meses son tan digeribles
como tú los
quieras hacer y la Vida te deje
en sueños
los tigres me persiguen
y me caigo
en paracaídas
pero soy más
rápido que el rayo
y he
aprendido a construir puentes en el abismo
la Vida
nunca deja de sorprenderme
y en ese año
que se fue
aprendí a
bailar con la desesperación
la ruptura y
la incertidumbre,
aprendí a
volar más alto para caer más bajo
y ahora
espero los sueños de 2015
como agua de
mayo:
independencias,
huertos comunitarios y amores eternos
poesía,
música, vegetarianismo y yoga
endulzan mi
paladar cada mañana
cuando
saludo al sol con una reverencia
y abrazo a
la Madre Tierra.
Gracias Vida
por ponérmelo difícil
y darme las
alas suficientes
para seguir
volando en la tormenta.
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